Siguiendo con la serie de artículos de EN LA RETINA, os presento hoy una imagen (video en este caso) bastante más agradable que la primera.
Corría el año 92, en una ciudad de Barcelona renovada, más cosmopolita que nunca. Epi, brillante jugador del Barça y de la selección española de baloncesto (aquella que ganó la plata en Los Ángeles 84) recogía la antorcha olímpica, acababa el recorrido al estadio olímpico, la mostraba a todas las almas presentes y prendía la flecha que el atleta paralímpico Pedro Rebollo debía lanzar hacia el pebetero.
Me gustaría saber lo que pasó por la cabeza de ese hombre en ese momento (yo se lo que pasó por la mía: “...que la encienda...”. Sobre sus hombros estaba el peso del éxito o fracaso de la inauguración más original y emocionante de los Juegos Olímpicos de la era moderna.
Corría el año 92, en una ciudad de Barcelona renovada, más cosmopolita que nunca. Epi, brillante jugador del Barça y de la selección española de baloncesto (aquella que ganó la plata en Los Ángeles 84) recogía la antorcha olímpica, acababa el recorrido al estadio olímpico, la mostraba a todas las almas presentes y prendía la flecha que el atleta paralímpico Pedro Rebollo debía lanzar hacia el pebetero.
Me gustaría saber lo que pasó por la cabeza de ese hombre en ese momento (yo se lo que pasó por la mía: “...que la encienda...”. Sobre sus hombros estaba el peso del éxito o fracaso de la inauguración más original y emocionante de los Juegos Olímpicos de la era moderna.
Un paso, dos, tres, cuatro y un último pequeño movimiento de pie para situarse en el lugar preciso. Arco tensado, él respirando pausadamente, el estadio y millones de personas con la respiración contenida, apunta al pebetero, lanza, redoble de tambor y explosión en todo el estadio, en toda Barcelona, en todo el mundo.
Han pasado 15 años y aún se me pone la piel de gallina. Lástima de Freddie, con él la inauguración habría sido aún mejor.
Han pasado 15 años y aún se me pone la piel de gallina. Lástima de Freddie, con él la inauguración habría sido aún mejor.
3 comentarios:
Joe! ya casi ni me acordaba! que emoción!!!! Epi que grande es!!! Seguro que estaría pensando "Joder que no me tropiece, joder, que me está mirando todo el mundo...". Y en cuanto a Rebollo, debería pensar "Por Dios, no la cagues...".
A día de hoy, se sabe que había un mecanismo que encendía directamente el pebetero al pasar la flecha, así que nunca se sabrá si realmente la flecha encendió el pebetero o no. Prefiero ser un romántico y creer que sí, es más bonito...
A mi no sólo es esta imagen la que me pone los pelos de punta, sino también esos 15 fabulosos dias que siguieron a todo esto y que estan imborrables en mi mente...
Tuve la oportunidad de participar en la ceremonia inaugural(yo era una de tantas personas que se convirtió en mar durante 15 minutos, los minutos mas fascinantes de mi vida, donde despues de nuestra actuacion solte alguna que otra lagrimilla al ser consciente de lo que acababa de hacer ante millones de personas...)
Aunque toda mi aventura olimpica empezó un año antes, donde cada sabado nos pasabamos todo el dia ensayando en el estadio olimpico para que luego este sueño se hiciera realidad...Pero lo que mas recuerdo de todo aquello(ensayos, ceremonia y los dias posteriores) fue el gran compañerismo que se instalo en todos nosotros, la amistad que crecio al compartir tanto con personas que ni siquiera conocia y que al final se convirtieron en una gran familia para mi...
"ella tiene poder, ella tiene poder, Barcelona es poderosa, barcelona tiene poder..."
Sin duda alguna, fueron unos dias inolvidables que siempre estaran en mi corazon...
Pos yo lo que más ecuerdo son "los mocacos" de nuesta infanta Elena cuando vió a su hermano Don Felipe... IMPRESIONANTE!!!! y lo peor, lo vieron los mismos millones de personas que vieron la ceremonia de los juegos de BCN'92.
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